Transportadores de tornillo , como "manipuladores de materiales" indispensables en la producción industrial, se utilizan ampliamente en las industrias química, alimentaria, de materiales de construcción y minera debido a su estructura simple, buen sellado y operación conveniente. Sin embargo, muchos operadores suelen tener una idea errónea: creen que mientras el equipo esté funcionando, no requiere mucha atención. Lo que no saben es que la limpieza regular y exhaustiva de los transportadores de tornillo no es sólo un "mantenimiento" superfluo, sino un "salvavidas" para garantizar la seguridad, la estabilidad y la eficiencia de la producción.
1. Garantizar la seguridad de la producción
Ésta es la tarea principal de los trabajos de limpieza, relacionada con la seguridad de la vida y la propiedad.
Prevención de incendios y explosiones
Explosiones de polvo: Al transportar materiales como cereales, piensos, gránulos de plástico y polvo metálico, se genera una gran cantidad de polvo combustible. Este polvo se acumula en la pared interior de la carcasa, en las láminas del tornillo y en la carcasa del cojinete. Cuando la concentración alcanza el límite explosivo, puede desencadenar una devastadora explosión de polvo cuando se expone a chispas, electricidad estática o altas temperaturas. La limpieza regular puede eliminar fundamentalmente la acumulación de polvo y cortar el "combustible" para la explosión.
Contaminación cruzada y reacciones químicas: Si el equipo se utiliza para transportar materiales de diferentes propiedades, los residuos pueden sufrir reacciones químicas, generando calor o gases inflamables y explosivos. Por ejemplo, algunos residuos químicos pueden arder espontáneamente al entrar en contacto con agua u otro material.
Prevención de lesiones mecánicas:
Durante la limpieza, se debe seguir estrictamente el procedimiento de "apagar, etiquetar y bloquear". Este no es solo un procedimiento de limpieza sino también un control de seguridad obligatorio, que previene eficazmente accidentes con lesiones mecánicas graves causados por un arranque accidental.
2. Garantizar la calidad del producto
Para industrias como la alimentaria, la farmacéutica y la química de alta gama, la limpieza es directamente equivalente a la calidad del producto.
Evitar la contaminación cruzada: cuando el transportador se utiliza para procesar productos de diferentes lotes, fórmulas o colores, los residuos del lote anterior pueden mezclarse con el siguiente lote, provocando contaminación, decoloración y degradación del producto, lo que resulta en el desguace de todo el lote y provoca importantes pérdidas económicas y de reputación para la empresa.
Prevención del deterioro del material: Los materiales residuales (especialmente alimentos y materia orgánica) pueden moldearse, pudrirse y generar bacterias en ambientes húmedos y calurosos. Estos materiales contaminados se convierten en fuentes de contaminación, afectando a todos los productos posteriores y representando una amenaza para la salud de los consumidores.
3. Mantener el rendimiento del equipo y extender la vida útil
La limpieza es la forma más directa de "cuidado" del equipo, reduciendo efectivamente los costos operativos.
Reducción de la carga operativa y el consumo de energía
Los materiales duros (como el cemento y ciertas materias primas químicas) pueden apelmazarse dentro de la carcasa o enredarse en el eje del tornillo. Esto conduce a un fuerte aumento de la resistencia operativa, una mayor carga del motor y un mayor consumo de energía. La operación de sobrecarga prolongada acortará la vida útil del motor.
Reducir el desgaste y las fallas del equipo
Los materiales particulados residuales exacerban el desgaste de las paletas y canales de los tornillos. Especialmente cuando se transportan materiales altamente abrasivos, los residuos actúan como "papel de lija", frotando constantemente y provocando que las hojas se adelgacen, los espacios se ensanchen y la eficiencia del transporte disminuya.
El material que ingresa a los sellos de los rodamientos acelera el desgaste de los mismos, lo que provoca fugas de lubricante o entrada de contaminantes, lo que en última instancia provoca agarrotamiento y daños en los rodamientos, lo que resulta en tiempos de inactividad no planificados.
Prevención de obstrucciones y convulsiones
Este es uno de los fallos más comunes. Los materiales pegajosos, higroscópicos o fibrosos se enredan y apelmazan fácilmente en la entrada de alimentación, los cojinetes o las cuchillas, lo que eventualmente provoca el atasco completo del equipo. Los problemas menores requieren limpieza manual y tiempo de inactividad, que demora varias horas; Los problemas graves pueden quemar el motor o romper el eje del tornillo, lo que genera costos de reparación y tiempo extremadamente altos.
4. Mejorar la eficiencia de la producción y garantizar una operación estable
Garantizar una eficiencia de transporte estable
Un transportador de tornillo limpio y que funcione sin problemas puede entregar consistentemente su capacidad diseñada, asegurando transiciones fluidas entre los procesos de producción ascendentes y descendentes. Los equipos con residuos internos o bloqueos parciales experimentarán volúmenes de transporte inestables, lo que afectará el equilibrio de todo el proceso de producción.
Reducir el tiempo de inactividad no planificado
La limpieza preventiva regular puede eliminar de raíz posibles obstrucciones y problemas de sobrecarga. En comparación con las paradas de emergencia debidas a averías, la limpieza y el mantenimiento planificados y de corta duración tienen un impacto mucho menor en los programas de producción.
5. Brindar oportunidades para la inspección de equipos
El proceso de limpieza en sí es un proceso de "revisión" integral.
Con el equipo descargado, los operadores o personal de mantenimiento pueden:
Inspeccione claramente el estado de desgaste de las palas espirales.
Verifique si hay ruidos anormales o flojedad en los cojinetes.
Identifique óxido o daños en la pared interior de la carcasa.
Inspeccione la integridad de los sellos.

















